lunes, 25 de mayo de 2009

¿Chávez y Cuba en el mismo saco de la burguesía mundial?


Alejandro Ruiz

Si algo le hace falta a toda revolución que pretenda construir el socialismo es la crítica y la autocrítica. Pero de allí a aprovechar fechas como el 1º de Mayo, Día Internacional de la Clase Obrera, para publicar desvaríos teóricos con lenguaje izquierdista contra el Presidente Hugo Chávez y contra la Revolución Cubana, al meterlos en el mismo saco de la burguesía mundial explotadora, existe un largo trecho.

En lo personal he formulado críticas directas a ciertos planteamientos del Presidente Chávez y también a conductas o políticas en instituciones y de funcionarios del gobierno venezolano. El propio Chávez es una persona muy crítica y autocrítica, y en ocasiones lo hemos visto fustigando los errores, reconociéndolos y rectificando para mejor. Pero lo que difunden algunas agrupaciones trotskistas excede a toda crítica: son verdaderas declaraciones de guerra contra Chávez y contra Cuba.

En nombre del socialismo revolucionario se ha publicado en el más popular de los medios alternativos venezolanos, Aporrea, un manifiesto de la Internacional Trotskista, Liga Internacional de los Trabajadores - Cuarta Internacional (LIT-CI), titulado Un 1º de Mayo de unidad y lucha contra la burguesía mundial, difundido el 29 de abril 2009. A pesar de lo interesante y sintomático del documento pasó mayo sin comentario alguno.

Esta proclama, aparentemente revolucionaria e incendiaria, llama a todos los trabajadores a “luchar contra todos los gobiernos y todos los patronos del mundo” -sin distinción-, y “defiende todo tipo de unidad” contra éstos. De allí no se excluye ni a Cuba ni a Venezuela. Todos serían lo mismo.

El documento fue originalmente publicado, el mismo día, en el Portal de la LIT-CI. Esta organización internacional, con sede en Brasil, agrupa a 17 partidos en América Latina y 8 en Europa que se proclaman fieles seguidores de los postulados del fundador del trotskismo, el dirigente político León Trotsky.

DESVARÍOS DE IZQUIERDISMO CONTRA EL SOCIALISMO
Ahora bien, antes de tratar de descifrar el manifiesto de la LIT-CI es necesario evidenciar la recurrente conducta de estos infalibles revolucionarios y sus similares, de descalificar a medio mundo; especialmente a quienes luchan contra la sociedad capitalista.

La lista de desvaríos de izquierdismo de la mayoría de las agrupaciones trotskistas -no todas- es larga y profunda. Ni sus propios compañeros ideológicos se salvan de la arremetida de estos combatientes de la libertad contra el “totalitarismo estalinista burocrático bonapartista terrorista reformista y populista”.

Veamos algunos casos contemporáneos de tan extraña conducta revolucionaria en varios países de América Latina, y luego con relación a Cuba y Venezuela, específicamente. Advertencia: las citas y las fuentes son reales, aunque cueste creerlo.

CONTRA LA REVOLUCIÓN LATINOAMERICANA
1.- La Liga Obrera Internacionalista ha descubierto que los gobiernos de Chávez, Evo y Correa están al servicio de “imperialistas ‘democráticos’ y de patrones ‘progresistas’; con su estafa de ‘revolución bolivariana’, con su apoyo a la burocracia castrista que se prepara a consumar la restauración capitalista en Cuba, sosteniendo así a los regímenes y gobiernos burgueses y dándole una nueva sobrevida a esta sistema capitalista imperialista putrefacto” (Democracia Obrera, 14-03-2008; “¡Por una Conferencia internacional de emergencia de las fuerzas del trotskismo…”).

2.- En Ecuador, el partido trotskista MAS llamó a votar Nulo en el referendo donde se aprobó la Nueva Constitución del 28 de septiembre 2008. Con esta política favorecía la opción del No y la permanencia de la vieja Constitución, aunque argumentaba que “Sería incorrecto no reconocer que el nuevo texto constitucional tiene importantes avances en relación a la Constitución de 1998 (…) El triunfo del No significaría volver al pasado, continuaría vigente la Constitución neoliberal y privatizadora de 1998 (…). El triunfo del No sería una victoria para la derecha oligárquica y retrógrada”. Después de este profundo análisis, concluyen: “Por lo tanto, nuestra decisión es por el voto Nulo” (Boletín MAS-Ecuador, 05-09-2008; “Manifiesto del MAS ante el Referéndum Constitucional”).

3.- En Bolivia, llamaron a votar en contra de la Nueva Constitución concertada, la cual derogó muchos aspectos de la vieja constitución neoliberal y excluyente. La burguesía separatista y fascista también llamó a votar No, pero el No de los trotskistas del partido Lucha Socialista contra Evo Morales era “diferente”, según “explican” ellos y Cantinflas: “Nuestro No es para derrotar un proyecto de Constitución resultado del acuerdo entre el gobierno y la derecha, o sea completamente diferente del No planteado por algunos sectores de la derecha” (Portal de la LIT-CI, 20-01-2009; “¡Vote No, en defensa de la Agenda de Octubre!”).

4.- En Colombia, el Partido Socialista de los Trabajadores (PST), citando a Trotsky, coincide con Uribe y los gobiernos de Estados Unidos y de la Unión Europea, al calificar a las guerrillas de las FARC como un grupo terrorista. Ni los gobiernos de México, Chile o Brasil, ni la OEA como agrupación se han atrevido a tanto. El PST dice que las FARC sólo “se dedicaron a echarle tiros al régimen, a realizar atentados terroristas (…) una política genuinamente stalinista” (El Socialista, Nº 637, marzo 2009; “Las FARC: reformismo armado y terrorismo”).

5.- Adicionalmente, estos trotskistas de la LIT-CI, que llaman a derrocar al gobierno “bonapartista de Chávez” y al “estalinista de los Castro”, ni por casualidad llaman a derrocar al gobierno fascista de Uribe. Todo lo contrario, sus afiliados del PST en Colombia argumentan que no hay las condiciones objetivas, porque “Ninguna guerrilla por sí sola tiene la más mínima posibilidad de derrotar a un ejército regular…”; la lucha guerrillera ha sido un “…sacrificio inútil de quienes desgraciadamente persistirán en una estrategia históricamente fracasada”. Y van más allá. El PST llama abiertamente a derrotar, a destruir a las FARC: “La derrota de la guerrilla (…) su destrucción como factor de distorsión de la lucha organizada de masas nos abrirá a los revolucionarios nuevas posibilidades…” (El Socialista, Nº 630, julio 2009; “Colombia: las FARC en la encrucijada”).

CONTRA LA REVOLUCIÓN CUBANA
1.- Para el PSTU de Brasil -principal partido de la LIT-CI-, en las dificultades de la Revolución Cubana nada tiene que ver el imperialismo estadounidense y su política de cinco décadas de bloqueo ecónómico, ni el derrumbe de la Unión Soviética en los años 90, que afectó dramáticamente la vida en la isla durante el llamado Período Especial. Estos exegetas del marxismo han descubierto que todo es culpa de “la dirección castrista”. Así lo aseguran, iluminados por una estampita de Trotsky: “El aislamiento de la revolución cubana, resultado de una política consciente de la dirección castrista, condujo a la isla a una profunda crisis en los inicios de los años 90. (…) el país dejó de ser un Estado obrero y pasó a ser un país capitalista administrado por los dirigentes del partido” (Marxismo.info, 16-03-2008; “Cuba, la renuncia de Fidel”).

2.- En el Foro Social Mundial del año 2001, en Porto Alegre, la Internacional Trotskista, en vez de confrontar al sistema capitalista, dedicó su tiempo y recursos a organizar un foro para atacar a Cuba. Y hasta declaraciones en la prensa burguesa de Brasil publicaron con gran regocijo. El ponente de la LIT-CI afirmó que eso de que “el imperialismo continúa atacando y continúa queriendo acabar con el Estado cubano (…) es una media verdad”. O sea, es medio mentira. Seguramente es un medio invento del “régimen castrista comunista”. Es decir, el imperialismo no es tan malo como dicen los cubanos. Otro preclaro militante del PSTU de Brasil dejó ver que en su país, gobernado en el 2001 por el socialdemócrata Fernando Henrique Cardozo, tenían más derechos que en Cuba: “Aquí yo tuve el derecho a decir lo que dije pero si estuviese en Cuba no hubiese tenido ese derecho”. Cualquier parecido con el discurso de la mafia de Miami, ¿será casualidad? (Marxismo.info, 15-10-2001; “Debate entre la LIT-CI y la delegación cubana en el Foro de Porto Alegre”).

3.- Ni el Ché Guevara se salva del mensaje descalificador de ciertos trotskistas. El Centro de Estudios Miguel Enriquez (CEME), de Chile, publica un famoso artículo de Gary Tennant, donde se pueden leer frases como estas: “…la actitud del Che hacia la democracia en la transición al socialismo fue esencialmente la de un stalinista”. Además, asegura que “…el Che sufrió ataques cada vez mayores dentro del régimen cubano…”. Ahora, todos sabemos que decir el “régimen cubano” es decir Fidel y el Partido Comunista, con lo cual se siembra cizaña, dudas entre revolucionarios. (Archivo Chile; “El Che Guevara y los trotskystas cubanos”. Publicado antes por el Partido Obrero de Argentina, en la revista teorica En Defensa del Marxismo, N° 18, Octubre 1997).

4.- En un folleto publicado en el año 2001, titulado El trotskismo en la revolución cubana, se difunden “análisis” como este: “A principios de los 90, cuando Castro se aleja de la URSS con motivo de su rechazo al proceso democratizador desatado por Gorbachov…”. Así que la desintegración de la URSS, la restauración contrarrevolucionaria del capitalismo en Europa del Este y en la Unión Soviética y la hegemonía absoluta del imperialismo estadounidense en el mundo por casi dos décadas, es el “proceso democratizador desatado por Gorbachov” que Cuba debió seguir para “liberarse de la centralización burocrática y alcanzar la libertad verdadera”. ¡Qué revolucionarios más extraños estos trotskistas!

CONTRA LA REVOLUCIÓN VENEZOLANA
1.- Si alguien duda de las declaraciones de guerra a muerte de fracciones trotskistas, he aquí un saco de botones: “No sólo el chavismo no es nuestro aliado (…) sino que es nuestro enemigo a muerte…” (Aporrea, 27-12-2007; “Contra el Trotsko-Chavismo, en defensa de la Revolución Permanente”, un escrito de 29 páginas y 33 citas).

2.- No sólo la ultraderecha llama a derrocar a Chávez. Mientras el “entrismo” surte efecto en el Gobierno Bolivariano, una fracción trotskista puede esperar un poco, pero apenas “…los trabajadores den las primeras señales de estar listos para el combate habrá que llamar a derrocar a Chávez y a sus FF.AA. como corresponde a una política revolucionaria frente a cualquier estado burgués” (Venezuela Cantaclaro, 14-05-2007; declaración de la LIT-CI, citada en “Internacional Trotskista llama a derrocar a Chávez”).


3.- Esa misma Internacional Trotskista rechazó “el cierre” del canal privado RCTV el 27 de mayo de 2007, argumentando que “En Venezuela se está produciendo un proceso de endurecimiento del régimen, (…) de Hugo Chávez que aumentan su control sobre los distintos sectores de la sociedad, entre ellos los medios de comunicación. Una clara manifestación de esto ha sido el cierre de la emisora RCTV...”. Es decir, no renovar la concesión al canal RCTV, según estos revolucionarios, es una “…medida tomada por Chávez contra la libertad de prensa…”. Además, citando textualmente a León Trotsky, tratan de ilustrar a Chávez: aún en “el hecho de que la clase obrera hubiera tomado el poder y expropiado a la burguesía no justificaba el cercenamiento de la libertad de prensa para la propia burguesía” (Portal de la LIT-CI, 19-06-2007; “Declaracion sobre el cierre de la RCTV”). Nadie se extrañe que mañana defiendan al canal privado Globovisión, utilizando estas mismas palabras.

4.- Algunos trotskistas también ejercen como defensores de la sensibilidad emocional del general Raúl Baduel, ex ministro de la Defensa de Chávez devenido en abierto conspirador opositor, hoy preso por acusaciones de corrupción de desaparecer 15 millones de dólares cuando ejerció ese cargo. Dijo el más publicitado vocero del trotskismo en Venezuela: “…rechazamos el expediente de claro corte stalinista de descalificar a través de la utilización de epítetos y calificativos como los de ‘escualido’, ‘traidor’, ‘salta-talanquera’, ‘agente de la CIA’, y otros, que funcionarios del gobierno, incluido el presidente Chávez, han proferido contra Baduel” (Aporrea, 08-11-2007; "Hay que sincerar la discusión sobre Baduel y la reforma constitucional, afirma Orlando Chirino”).

5.- Con un rimbombante título, dijo otra fracción hermana: “Chávez (…) abrió un curso bonapartista: intentó eternizarse con el referéndum de 2007 (…) en Venezuela cada vez creen menos en los falsos discursos antiimperialistas de Chávez” (Boletín Juventud del MAS-Ecuador, 18-08-2008; “Cómo luchar contra el Castro-Chavismo-Evomoralismo”).

6.- Como sabemos, la Reforma Constitucional fue derrotada con una diferencia de 1% debido a una feroz campaña de la burguesía y unos cuantos errores endógenos. En Venezuela, mientras dos fracciones trotskistas -acertadamente- llamaron a votar Sí por Chávez, otra fracción llamó a votar Nulo y otra fracción trotskista llamó a votar No en contra de “la reforma constitucional bonapartista del chavismo” del 2 de diciembre de 2007 (Portal de la LIT-CI, 29-11-2007; “Venezuela: Por qué llamamos a votar por el No”).

7.- En las elecciones locales del 23 de noviembre de 2008, la fracción Unión Socialista de los Trabajadores (UST) llamó a votar Nulo, porque “el único voto de clase, independiente del gobierno, de los partidos burgueses de oposición es el Voto Nulo” (Portal de la LIT-CI, 18-11-2008; “Venezuela: Frente a los comicios del 23 de noviembre”).

8.- Para el referendo de la Enmienda Constitucional aprobada el 15 de febrero 2009, coincidiendo con las prioridades de la burguesía y del imperialismo, la fracción trotskista Unión Socialista de Izquierda (USI) llamó a votar Nulo porque “las prioridades del gobierno no coinciden con las de los trabajadores y el pueblo excluido y explotado” (Indymedia, 12-02-2009; “Orlando Chirino llama al voto Nulo en Venezuela”).

9.- Además de llamar a votar No contra las propuestas constitucionales de Chávez, algunos trotskistas también proponen su fórmula “subversiva” para ir al socialismo: “Aquí la cogestión es el paso para transitar hacia el socialismo” (El Nacional, 26-11-2007; “Entrevista a Orlando Chirino”).

10.- Pero de todos, quizás, el deporte preferido de las cuatro fracciones trotskistas venezolanas, y sus voceros afines, es atacar al Partido Comunista (PCV), que es el único partido que en Venezuela -con sus virtudes y defectos- asume como marxista-leninista y bolivariano. Un día lo acusan de “Y”, otro día de “Z”, luego de todo lo contrario. Uno de estos voceros, de reconocida trayectoria, escribió: “O es que acaso Hitler no extrajo sus propias lecciones de la experiencia soviética”. Después de está máxima: fascismo igual comunismo, ¿qué se puede debatir? Seguidamente, arremete contra el marxismo-leninismo: “Se trata de realizar una crítica radical a la racionalidad burocrática que funda al marxismo-leninismo como falacia revolucionaria, porque tiene nefastas consecuencias en el campo de la praxis revolucionaria. El marxismo-leninismo es un obstáculo para pensar la democracia socialista” (Aporrea, 13-04-07; “Gamelote para estalinistas con deseos de aprender”).

11.- Hay algunos que hasta publican edictos inquisitorios que piden juzgar a los dirigentes del Partido Comunista de Venezuela por “…verdaderos crímenes contra la Humanidad” (Aporrea, 25-06-07; “¡Socialismo a lo Burgués!”). Así mismo, como se lee.

12.- Otro excelso trotskista también descalifica a los comunistas del PCV, señalándolos de “reformistas estalinistas”; pero -sin pudor- firma sus escritos como militante del “Batallón Nº 13 ‘Alberto Lovera’ del PSUV” (Aporrea, 23-06-08; “¿Reimpulso productivo o impulso hacia el abismo?”). A este catedrático revolucionario no le incomoda que ese Alberto Lovera haya sido el secretario Político-Militar del PCV, martirizado y asesinado en 1965 acusado de ser un “criminal estalinista al servicio de Moscú”. De verdad, no los entiendo.

Y así, infinidad de documentos y discursos de los fragmentados grupos internacionales trotskistas; además de los mencionados: Fracción Trotskista-Estrategia Internacional, Liga Obrera Internacionalista, Liga por la IV Internacional, Corriente Internacional Revolucionaria, CICI, UIT, etc; en total unas 42 “auténtica IV Internacional”. Sólo algo los une: el anticomunismo y despotricar de los demás.

UN MANIFIESTO CONTRA “TODOS LOS GOBIERNOS”
En relación con el manifiesto del 1º de Mayo, publicado en Aporrea el 29 de abril 2009, el planteamiento central de la LIT-CI a los trabajadores es la generalidad, que no distingue gobiernos ni patronos. Así, todos son iguales. Según estos trotskistas, el gobierno y las empresas de propiedad social en Cuba o en Venezuela son iguales al gobierno y a las empresas privadas en Colombia o en Inglaterra. Todos son parte de la burguesía mundial, incluyendo a Hugo Chávez y a Fidel y a Raúl Castro. Tremendo desvarío.

El manifiesto de la LIT-CI, que tiene seguidores en Venezuela, afirma: “Los gobiernos de todo el mundo atacan a los trabajadores”. Es decir, todos, sin excepción. Y por lo tanto, los trabajadores deben sumarse a todas las protestas contra todos los patronos y todos los gobiernos. Es decir, en Venezuela hay que sumarse a las protestas de la derecha contra Chávez; en Cuba hay que crear protestas contra el gobernante Partido Comunista, sumándose a los mercenarios proestadounidenses; en Bolivia hay que sumarse a las protestas reaccionarias contra Evo Morales y las empresas nacionalizadas; y en Ecuador hacer comparsa con la oligarquía proimperialista.

Veamos algunos fragmentos reveladores del “analisis objetivo” de la crisis capitalista actual, según el reciente manifiesto de la LIT-CI:

“Frente a la crisis, hay una unanimidad en todos los países del mundo: sus gobiernos tratan de salvar de todas las maneras a los grandes empresarios (…) Los gobiernos de todo el mundo ya inyectaron más de cuatro billones de dólares en el sistema financiero mundial…” (los resaltados son nuestros).

El manifiesto mundial de la Internacional Trotskista en muy interesante por lo que dice, pero también por lo que no dice. Del gobierno del imperialismo estadounidense, donde se originó la masacre de Chicago de 1886 y principal centro de la crisis y explotación capitalista mundial, apenas un párrafo tibio. Sin embargo, arremete con saña contra los gobiernos de Lula y de Chávez. Son los únicos gobernantes que menciona directamente, además del “simpático” Obama.

Nada de señalar en Latinoamérica a los gobiernos derechistas de Perú ni de Colombia, donde asesinan y encarcelan a dirigentes sindicales, que tal vez no merecen su comentario porque la mayoría de esos muertos son dirigentes comunistas. Sin negar que existen casos graves de sicariato patronal y latifundista en otros países de Latinoamérica, Venezuela entre ellos.

Hablar de forma genérica de los “todos los patronos y todos los gobiernos del mundo” es una forma de exculpar a los directamente responsables: las transnacionales, los grandes capitalistas financieros y sus oligarquías locales y gobiernos reaccionarios.

Estos superrevolucionarios -casualidad permanente- coinciden con la derecha procapitalista y proimperialista en su “nuevo” discurso de negar todo avance y cambio transformador de gobiernos como el dirigido por Chávez, jugando al desencanto popular.

Al respecto, es ilustrativa una noticia publicada en el diario venezolano Últimas Noticias, el 04-05-2009, p. 16: “El coordinador nacional de la tolda [de derecha neoliberal] Primero Justicia, Julio Borges, afirmó que el gobierno del presidente Chávez se ha convertido en el ‘peor patrono’ que existe en Venezuela (…) en realidad ‘lo que ha hecho es llenar a Venezuela de burocracia”, en referencia al incremento de empresas de propiedad social.

Mientras algunos superrevolucionarios están agazapados esperando para “derrocar a Chávez y a sus FF.AA. como corresponde a una política revolucionaria”, el Presidente de Venezuela baja el desempleo a menos de 8%, aumenta los salarios 20% (aunque debería ser más), se nacionalizan empresas, y unos 29.000 obreros tercerizados ingresan a la nómina fija de la estatal petrolera Pdvsa desde 2005 hasta fecha. Sin negar que allí surjan críticas válidas y necesarias para el debate, pero llamar a derrocar a Chávez es otra cosa.

Bueno, sigamos con el manifiesto de la Internacional Trotskista. Según la LIT-CI, en todos los países del mundo gobierna la burguesía, Cuba incluida. En consecuencia proclaman:

“… un alerta especial a todos los trabajadores para que no confíen en sus gobiernos, por más que se proclamen ‘populares’, ‘progresistas’ e, inclusive, ‘revolucionarios’. La mayoría de la izquierda mundial apoya a este tipo de gobiernos burgueses llamados ‘progresistas’…”.

Precisamente el llamado se hace en estos tiempos, cuando han surgido diversos gobiernos latinoamericanos enfrentados al imperialismo, que es la fase superior del capitalismo.

Seguidamente, proclaman ante el mundo: “La LIT defiende todo tipo de unidad en la lucha para enfrentar los ataques de la patronal y sus gobiernos”. Siendo así, válido “todo tipo de unidad en la lucha”, los trabajadores pueden unirse con dirigentes fascistas, sindicaleros, paramilitares, medios de difusión privados, para enfrentar también a los gobiernos de Venezuela, Bolivia, Ecuador, Nicaragua y Cuba.

Luego de toda esta parafernalia revolucionaria, lanzan sus siete consignas de combate, que se suponen son el resumen de los postulados, la síntesis del análisis para la acción subversiva contra el estatus quo capitalista. ¡Sorpresa!: Todas son consignas defensivas, en su mayoría sólo economicistas, reivindicativas; pero no plantean siquiera luchar por aumentos de salarios. Menos incitan a expropiar ni nacionalizar empresas, ni llaman a construir el socialismo.

Después, explican algo que a primera vista es correcto: “La LIT (…) apoya el esfuerzo de millares de activistas que luchan en todo el mundo para organizar sindicatos independientes, combativos y democráticos, y otras formas de organización de los trabajadores y de los sectores populares”.

Sin embargo, con este loable argumento grupos trotskistas apoyaron a Lech Walesa y a Solidarinoc, en Polonia; apoyaron a Gorbachov y a Yelsin en la desintegración y restauración capitalista en la Unión Soviética; apoyaron a los activistas anticomunistas chinos de la “Comuna de Pekín”, de la Plaza Tiananmen; y se apoya a mercenarios que dentro y fuera de Cuba tratan de conformar “sindicatos independientes” de la Revolución Cubana.

En pleno auge del proceso contrarrevolucionario en la URSS, a principio de los años 90, el más connotado teórico del trotskismo mundial del momento, Ernest Mandel, proclamó orgulloso: “ahora pueden ver todos los comunistas del mundo quiénes son los verdaderos revolucionarios y contrarrevolucionarios. Trotski, los trotskistas, Gorbachov y los seguidores de Gorbachov se encuentran en el campo de la revolución; Stalin y los estalinistas están en el campo de la contrarrevolución” (1).

Pero se omitía un “pequeño” detalle: Stalin había muerto en 1953, “Gorbachov y los seguidores de Gorbachov” estaban vivos y actuando, y no precisamente en “el campo de la revolución” sino a favor del imperialismo.

Ahora, en el año 2009, luego de todas esas brillantes ideas contra “todos los patronos y todos los gobiernos del mundo”, los señores de la LIT-CI realizan una declaración de “lucha contra el capitalismo imperialista”. ¿Y que proponen para liquidar al capitalismo imperialista?: “Por eso, este 1º de Mayo será, más que nunca, una manifestación de denuncia no sólo de la crisis, sino del propio capitalismo”. Sí, denunciar.

Es más o menos como decir: Señores capitalistas yo los denuncio a ustedes ante el mundo y sus medios capitalistas, y por eso desaparecerán. ¡Qué bien! Pero, a la vez descalificó y combato a muerte a quienes luchan contra el capitalismo.

Finalmente, el manifiesto de la Internacional Trotskista concluye que “La clase obrera necesita un Partido Mundial de la Revolución Socialista”. Y adivinen quiénes son los únicos que en el mundo encarnan ese partido: ellos, solamente ellos.

Una nota al margen: estoy muy preocupado. Los revolucionarios de Liga Internacional de los Trabajadores - Cuarta Internacional (LIT-CI) no utilizaron en este manifiesto ni una vez la palabra mágica para resolver toda disputa con partidos de izquierda o de derecha: estalinista. Y muy poco el otro comodín habitual: burocracia. Mucho menos la combinación preferida de ambas: burocracia estalinista. ¿Qué está pasando en la Internacional Trotskista? ¿Será que saben que buena parte de los sindicatos combativos y clasistas tienen raíces y dirigentes marxistas, que no les agrada ese discurso pontificador simplista, usado para descalificar a toda la izquierda que no se proclame del grupo de la inmaculada concepción trotskista? O habrá comenzado el debate.

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Notas
1.- Ludo Martens. “El trotskismo al servicio de la CIA contra los países socialistas”, Partido de los Trabajadores de Bélgica, 20-10-1992; republicado en Chamosaurio, 05-08-2008.

2 comentarios:

Roberto López dijo...

Demasiado largo... Nadie, excepto los eruditos, se calan esta lectura de por sí insípida, inodora y también incolora. Debe de practicar la síntesis o hacer una especie de resumen al inicio de tu escrito.

Estas desfasado…Ya no hay lucha contra el capitalismo. El capitalismo ya triunfó y sigue evolucionando para corregir sus fallas. El capitalismo produce el 95% de los bienes y servicios de la humanidad y no creo que eso cambie en los próximos meses.

Fíjate como es tu desfase, que Hugo y sus consejeros están esperando la recuperación de las economías capitalistas para ver si vamos a comer o no. Menos mal que no dependemos del avance económico de Corea del Norte, Cuba, Vietnam, Irak, Irán.
roloiskra@gmail.com
Enviado el 27/05/09; 08:10

Nelson Lucena dijo...

Camaradas: Siempre hemos tenido un sentido crítico fuerte al entrismo y a la posición trotskista en todos los sentidos; no obstante, el análisis que hacen ustedes en esta nota los desnuda completicos.
Gracias.
nelsonjlucena@hotmail.com
Enviado el 28/05/09; 00:55