sábado, 11 de abril de 2009

Los comunistas y el golpe de abril


Alejandro Ruiz

¿Qué hicieron los comunistas venezolanos durante los sucesos del golpe de Estado contra la Revolución Bolivariana en abril de 2002? Parece que nada.

Han pasado 7 años, y entre tantos libros, documentales, artículos, revistas y folletos difundidos por medios y organismos privados y del propio gobierno, no existe publicado un sólo documento, entrevista o relato de la posición o actuación de los militantes del Partido Comunista de Venezuela durante los días del 11 al 14 de abril de 2002.

Este silencio mediático y negación de los comunistas no debería extrañar a nadie. Todavía en este proceso de construcción del socialismo del siglo XXI es la norma no escrita. Es más fácil ver a un banquero en el estatal canal 8 (VTV) que a un dirigente del PCV. O tal vez la cautela de los comunistas no les permite hablar mucho de estos temas latentes públicamente.

¿Qué hicieron los hombres, mujeres y jóvenes de esta organización política revolucionaria que asumió a Hugo Chávez como su candidato desde febrero de 1998 y líder del proceso revolucionario? Por cierto, en una relación compleja pero sincera en la propuesta de marchar rumbo al socialismo.

Es difícil saberlo entre ese mar de Pueblo y de militares patriotas que el 13 de abril 2002 retornó a Hugo Chávez al poder legítimo de la República Bolivariana de Venezuela. Y no sé si a los comunistas les importe mucho que alguien los mencione. Pero la historia es algo más que héroes y televisión.

Hay momentos cruciales en que no traicionar los principios ni renegar del líder caído es un mérito es sí mismo. ¡Y cómo hubo traiciones y renegados en los cruciales y caóticos días de abril de 2002! Es fácil hablar de principios y de lealtad en la calma de un cargo público o en el rutinario forcejeo electoral. Abril es otra historia.

Es sorprendente saber hoy, que el PCV fue el único partido político que, con “los acontecimientos en pleno desarrollo”, fijó una posición como tal por escrito y caracterizó correctamente los sucesos el mismo 12 de abril de 2002. Además, entendieron al momento que había un golpe mediático y un golpe militar oligárquico entrelazados, con mandato del imperialismo estadounidense; a la vez que se mostraron dispuestos a combatir con todas las formas de lucha para enfrentar el golpe de Estado fascista, al señalar en ese documento remitido a organizaciones y gobiernos revolucionarios del mundo:

“Los Comunistas, y el movimiento popular en general, estamos urgidos de cooperación internacional, con pronunciamientos que ayuden a romper el cerco mediático, con solidaridad material de todo tipo que nos ayude a responder a las necesidades del momento…” (subrayado nuestro).

Más sorprendente aún es saber que un mes antes del golpe de abril de 2002, el Partido Comunista de Venezuela reunió su XI Congreso en Caracas con unos 1.000 delegados de todo el país y comunicaron al Presidente Chávez lo inminente de los acontecimientos subversivos de la burguesía y el imperialismo, indicando que habría participación de sectores militares -especialmente de la Guardia Nacional-, la Policía Metropolitana (preparada meses antes con el Plan Bratton), la Policía de Miranda (dirigida por el agente de la CIA Hermes Rojas Peralta) y las policías locales de Chacao y Baruta.

El 10 de marzo 2002, el mensaje del XI Congreso de los comunistas venezolanos fue muy claro y directo: “¡Aplastemos la conspiración. Impulsemos la Revolución!”. Lamentablemente este llamado y las conclusiones del PCV fueron subestimadas por los organismos de inteligencia y el alto gobierno, confiados en el total respaldo de los mandos militares, cuestión que los comunistas no compartían y sugerían crear las Unidades de Defensa Popular (UDP).

Los tantas veces vilipendiados comunistas de Venezuela asumieron su “destino” como partido, no como individuos: enfrentar el golpe de Estado con el Pueblo en la calle; informar con pintas, consignas y comunicados que “Está preso, no ha renunciado”, para levantar la moral y la fe de las masas populares en que el Presidente Chávez no había firmado renuncia alguna; sumarse junto al Pueblo a presionar las guarniciones militares para que se respetará la legalidad constitucional; informar a los demás partidos comunistas y movimientos revolucionarios del mundo lo que realmente estaba sucediendo en Venezuela; buscar apoyo internacional para contrarrestar el golpe fascista.

No sólo eso. Por buena fuente hemos conocido que el entonces Presidente del PCV, Pedro Ortega Díaz, un señor de casi 90 años (fallecido en febrero de 2006), estaba el 11 de abril 2002 en las cercanías de Miraflores y Puente LLaguno atendiendo el llamado de defender la Revolución, donde cayeron muertos y heridos decenas de venezolanos y venezolanas por disparos de francotiradores y de la Policía de la Metropolitana. Y así, otros dirigentes comunistas en Caracas hacían lo mucho o poco que podían.

En las gobernaciones y alcaldías Bolivarianas que los días 12 y 13 de abril 2002 comenzaron a ser asediadas por la arremetida fascista y los pequeños golpes de Estado locales, hay testimonios de lealtad y valentía de dirigentes comunistas y de mucha gente humilde que junto a dirigentes consecuentes del MVR, PPT, Liga Socialista y otras organizaciones, permanecieron defendiendo esos espacios de gobierno y denunciando el golpe contra el Presidente Chávez, sin tener, en muchos casos, cargo alguno. Mientras varios directores, altos funcionarios y dirigentes políticos “destacados” se esfumaron, y algunos hasta reconocieron al gobierno de facto de Carmona Estanga, como el caso de unos cuantos gobernadores y alcaldes “chavistas” que se pusieron a la orden del “gobierno de transición”. En tales circunstancias poco importaba quien tenía más votos o más gente inscrita en tal o cual partido. En abril todo es diferente.

UN DOCUMENTO PARA UNA HISTORIA SIN HÉROES
El 12 de abril 2002, en horas de la tarde, el Buró Político del Partido Comunista de Venezuela (PCV) difunde vía Internet y por fax un comunicado muy importante para el momento y para la historia poco conocida o poco difundida del golpe de abril. Quienes lo recibieron pueden dar fe de su veracidad y en algunas páginas Web de otros países es posible ubicarlo.

A pesar de la confusión e incertidumbre reinante sobre lo que realmente sucedía el 11 y 12 de abril 2002, inclusive en sectores del propio alto gobierno, el documento del PCV refleja con información precisa el trasfondo de los acontecimientos, relata detalles que se conocieron tiempo después y proyecta el posible desenlace de la movilización popular “del heroico pueblo de Bolívar que hoy se enfrenta al imperialismo”, lo cual sólo se podía lograr saber y redactar al calor de la confrontación porque los comunistas estaban coordinando información y algunas acciones como organización en distintos lugares de los acontecimientos; es decir, con su gente movilizada.

En el contexto de desconocimiento de la Constitución Bolivariana, el Presidente Chávez detenido, Pedro Carmona autoproclamado presidente, disolución y destitución de todas las instituciones democráticas, persecución política y allanamientos a dirigentes revolucionarios, asesinatos a mansalva en las calles y una ofensiva mediática reaccionaria para tergiversar los hechos y desprestigiar a Chávez; la dirección nacional del PCV se reúne y elabora y difunde el siguiente comunicado a las organizaciones, movimientos y gobiernos revolucionarios y democráticos del mundo, donde de entrada califica los sucesos como “un golpe de estado fascista”. Veamos unos cuantos párrafos desde el inicio:

“Lo que realmente ocurre en Venezuela es un golpe de estado fascista”
Comunicado del Buró Político del PCV. 12 de abril del 2002


“El Imperialismo Norteamericano echó sus cartas en el caso de la Revolución Bolivariana de Venezuela, el día de ayer 11 de abril (casualmente 11) con la intermediación de grandes sumas de dinero y conciencias militares compradas, con respaldo tecnológico satelital para controlar las comunicaciones e imponer su política mediática de desmoralización, guerra psicológica, desinformación y desmovilización (…) muchos de los pronunciamientos militares ya editados estaban a la espera de la orden de Washintong para proceder al golpe…”.

-Como vemos, el mismo 12 de abril el PCV señala al imperialismo, la compra de conciencias militares con mucho dinero, el control satelital de las comunicaciones y los pronunciamientos militares ya editados; todo esto se comprobó en las investigaciones de la Asamblea Nacional meses después.-

“…Todo es una farsa. Chávez no se rindió, como dicen, sino que fue arrestado y hecho preso, no ha sido presentado en público, no han presentado ningún documento que demuestre su "renuncia". Las imágenes transmitidas una y otra vez de los "francotiradores" son imágenes de simpatizantes del proceso revolucionario que se defendían del ataque salvaje de la Policía del Alcalde Mayor Alfredo Peña, de los 11 muertos anunciados por ellos 9 son de dirigentes revolucionarios, de los cinco asesinados con tiros en la frente 4 son revolucionarios, entre estos podemos mencionar al guardaespaldas del Vicepresidente Diosdado Cabello, a tres representantes de la Coordinadora Popular de Caracas, tres dirigentes comunitarios del estado Vargas, el Disip asesinado por defender a varios transeúntes sometidos al fuego de la canalla reaccionaria , entre otros que fueron asesinados vilmente por francotiradores sí, pero francotiradores de la Policía Metropolitana y de el "izquierdista partido" Bandera Roja, plenamente entregado a los brazos del imperialismo…”.

-Para el PCV era muy importante señalar que Chávez no se había rendido ni había renunciado. Este parte informativo detallado sólo es posible porque los comunistas tenían gente allí, actuando cerca de Puente Llaguno y Miraflores. Es el PCV quien por primera vez, al día siguiente, asume la defensa de los mal llamados “pistoleros de Puente Llaguno” y denuncia a los francotiradores de la Policía Metropolitana y de Bandera Roja, para tratar de desmontar el famoso y dañino video del canal Venevisión. El comunicado describe como asesinaron a dirigentes con tiros en la frente y hace referencia a la vinculación de varios asesinados.-

“…La reacción quiere hacer ver que Chávez se entregó rendido para cumplir el libreto que les entregó el Departamento de Estado y la CIA. Hoy, por ejemplo, tomaron la embajada de Cuba para agredir al gobierno cubano (…) Están haciendo ver a los anteriores miembros del gobierno como asesinos, como bandidos y prófugos, mientras que la Policía Metropolitana allana y asesina dirigentes populares en Catia, 23 de Enero y otros sectores de tradición revolucionaria...”.

“En Venezuela se dio un golpe de estado, con matices "innovadores", pero un golpe de estado al fin. ¿Quién eligió a carmona estanga, representante de los empresarios? ¿Por qué no dejan instalarse a la Asamblea Nacional? ¿Por qué cambian la constitución y forman gobierno sin legitimidad? Porque es un golpe de estado, del cual ya veníamos previniendo, un golpe de estado con matices institucionales. En su plan sigue la entrega de las industrias básicas (hierro, petróleo, aluminio, electricidad) al imperialismo, la ruptura de la política de cooperación con los países pobres y la ruptura de la política de precios de la OPEP; en sus planes sigue la eliminación selectiva de los dirigentes revolucionarios, iniciando con el Comandante Hugo Chávez, a quien no han presentado públicamente y pretenden asesinar”.

-En este párrafo los comunistas alertan que el golpe tiene como trasfondo entregar las riquezas nacionales al imperialismo y que los golpistas pretenden asesinar a Chávez. Luego señalan lo que sólo era posible percibir estando en las entrañas del Pueblo humilde, cerca de los cuarteles y en algunas instituciones bolivarianas. No olvidemos que todavía es 12 de abril-

”Existen focos de resistencia en el movimiento popular, en las fuerzas armadas y en algunos gobiernos locales, pero su poder mediático y comunicacional tergiversa lo que pasa en nuestro país, acusan a los Guardias Nacionales que protegieron el Palacio mientras esconden a los Policías de Chacao, Baruta y Metropolitanos que sí hirieron y asesinaron a quienes respaldaban en un momento de crisis la revolución bolivariana”.

-El Buró Político del PCV enfatiza que la batalla también es mediática, que los medios privados están tergiversando todo, y sigue insistiendo por la vida del Presidente Chávez y de los dirigentes populares-

”Es necesario difundir esto, es necesario exigir la presentación del Comandante Chávez y el respeto de su vida y sus DDHH, el respeto de los derechos humanos de los dirigentes populares que hoy son perseguidos en medio de un estado de sitio no decretado en la ciudad de Caracas”.

-Los dirigentes del PCV denuncian un estado de sitio no decretado y seguidamente solicitan apoyo de “todo tipo” para enfrentar, junto con el movimiento popular, a la dictadura fascista.-

“Los Comunistas, y el movimiento popular en general estamos urgidos de cooperación internacional, con pronunciamientos que ayuden a romper el cerco mediático, con solidaridad material de todo tipo que nos ayude a responder a las necesidades del momento…”.

-El documento finaliza resaltando la confianza en el heroísmo del pueblo de Simón Bolívar.-

“Saludos bolivarianos y revolucionarios del heroico pueblo de Bolívar que hoy se enfrenta al imperialismo”.

Y así fue, en abril.