viernes, 24 de septiembre de 2010

Oposición paga aviso racista contra jefe de campaña del PSUV-PCV

Pablo Medina llama “bacalao negro” a Aristóbulo Istúriz


Alejandro Ruiz

El candidato de los partidos de oposición al parlamento por el Distrito Capital, Pablo Medina, publicó este jueves 23 de septiembre 2010, en el diario Últimas Noticias, un mensaje a página completa en el cual convoca a sufragar por aquellos “que no sean esclavos del jefe de gobierno” y llama “bacalao negro” al candidato chavista por esa circunscripción, en clara alusión al profesor Aristóbulo Istúriz, un afrodescendiente, y quien es el jefe nacional de campaña de la alianza revolucionaria PSUV-PCV.

Medina, dirigente de la alianza derechista MUD, aspira un puesto a la Asamblea Nacional con los votos de zonas populares de la capital venezolana, donde también está postulado Istúriz, ex ministro de Educación y vicepresidente del partido del Presidente Chávez.

En el aviso, pagado como publicidad electoral en el diario de mayor circulación nacional, Pablo Medina aparece en una fotografía junto al también candidato opositor por Caracas, Stalin González. Seguidamente, en un extenso y virulento texto titulado “¡Vamos mi gente!”, arremete contra el Presidente de la República, despotrica de los candidatos de la alianza del Partido Socialista Unido de Venezuela y el Partido Comunista de Venezuela (PSUV-PCV) e incita a la Fuerza Armada a la rebelión el día de las elecciones.

Paradójicamente, los dirigentes de la oposición afincaron su campaña a la Asamblea Nacional en llamar “A votar contra el odio”, “Para vivir y progresar en Paz” y publicando en la prensa que “En Venezuela queremos Paz, respeto, tolerancia y democracia”. En los diversos medios de difusión y en reuniones se presentaron como alternativa de inclusión y de amor al prójimo. Mientras, no se cansaron -ni se cansan- de acusar al mandatario venezolano y a los candidatos de la alianza revolucionaria PSUV-PCV de fomentar la intolerancia, el discurso violento y dividir al país.

Sin embargo, llegando al final de la contienda electoral que este próximo 26 de septiembre 2010 definirá los 165 integrantes del Parlamento Nacional, se han desatado los demonios en el campo de la contrarrevolución en Venezuela, mostrando su verdadera esencia y saña. Los candidatos opositores no pudieron disimular mucho tiempo, con su discurso fingido de peace and love, “los amamos a todos, voten por mí”.

Es realmente vergonzoso, contrario a todas las normas de contiendas electorales y a los derechos ciudadanos consagrados en la Constitución Nacional, el libelo publicado el último día de campaña con la firma del candidato opositor Pablo Medina en el diario Últimas Noticias (23-09-2010, p.43). Ni siquiera su copartidario del ultraderechista Movimiento 2D, Miguel Henrique Otero, se atrevió a insertarlo como publicidad en el diario El Nacional.

La propaganda pretendidamente electoral de la oposición increpa y difama al Presidente Chávez, como ya es su costumbre: “…el dinero que pertenece a todos los venezolanos, lo robas…”.

Además, mostrando de donde proviene el mensaje provocador, señala: “…sólo una foto de muertos arrumados en la morgue escandaliza y activa a tu aparataje de arrodillados…”.

Al principio de la publicación se llama a votar por diputados “…que no sean esclavos del jefe de gobierno”. Y luego, casi al final, la oposición lanza lo más despreciable, instigador y racista de su discurso, aludiendo primeramente al Presidente de la República y luego al candidato Aristóbulo Istúriz, por el color de su piel:

“Tú [Chávez] y tus compinches se las tiran de vivos lanzando retos al pueblo opositor (…) ¿Por qué tu bacalao negro, después que lanzó el reto a debatir no tuvo la misma agalla (…) Te advierto, nosotros si vamos a defender democráticamente el voto y la FAN [Fuerza Armada Nacional] institucional estará con el pueblo venezolano”.

La campaña electoral ha terminado, el desprecio de la oligarquía y sus mercenarios no. Que no lo olvide el glorioso pueblo bolivariano de Venezuela.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Los señores de la oposición, como éste racista y su compinche señor Ramos Allup y otros salta talanqueras, son los del vómito negro, como los llamó José Vicente Rangel, recientemente. Hacen lo que hacen, porque aquí ya se hizo costumbre la impunidad. Si la Constitución y las leyes castigan estos delitos, por qué los agraviados no se defienden con las leyes en la mano, como ciudadanos, sin que haya necesidad de utilizar las investiduras. El Código Penal, es viejo, caduco, unos cuantos gobiernos han pasado por este. Pero condena los delitos de calumnia, difamación, amenazas, ofensas, irrespetos contra los ciudadanos. ¿Entonces hasta cuando dejar a estos insultadores de oficio y politiqueros que sigan haciendo lo que les da la real gana? Estos nuevos mecanismos de defensa o formas de hacer campaña electoral, insultando, vejando, denigrando, calumniando, haciendo racismo, y traicionando la identidad nacional, es una modalidad que sólo la ha tolerado la Revolución Bolivariana, pues antes atreverse a pronosticar la muerte de un Presidente, o faltarle el respeto, era motivos suficientes para meter en cinto y entre rejas al que osara quebrantar la ley. Ahora la Ley de la Costumbre impuesta por la oposición no tienen castigo, gozan de inmunidad.